Con el fin de promover mayor actividad económica, la representante por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Yashira Lebrón Rodríguez, anunció la radicación del Proyecto de la Cámara 336 que busca excluir del Impuesto de Ventas y Uso todos los servicios relacionados al corretaje de bienes raíces tanto residencial, comercial, agrícola e industrial.

Según explicó la representante por el Distrito #8 en la Exposición de Motivos de la medida, “la imposición del Impuesto de Ventas y Uso (IVU) a los servicios de bienes raíces está teniendo un efecto perjudicial en la industria y más importante aún en el consumidor, reduciendo las transacciones de bienes raíces y por ende reduciendo el ingreso producto de los impuestos recaudados”.

La pieza legislativa enmienda las Secciones 4010.01 y 4110.01 de la Ley 1-2011, según enmendada, conocida como ‘Código de Rentas Internas de Puerto Rico de 2011’ para establecer la eliminación del IVU en todo el proceso transaccional.

“En una transacción de bienes raíces, participan un grupo de profesionales a lo largo del proceso, hasta que finalmente la propiedad se le entrega al nuevo adquirente. Entre dichas personas se encuentran casi todas las incluidas como servicios profesionales designados, incluyendo a los corredores de bienes raíces. Por ende, el precio por unidad final incluye el costo de todos estos servicios”, dijo Lebrón Rodríguez.

Durante la pasada década, los precios de venta de las propiedades residenciales en Puerto Rico enfrentaron un decrecimiento del 23 por ciento desde el año 2006 al 2019, según se desprende de un informe publicado por la Agencia Federal de Financiamiento de Vivienda (FHFA, por sus siglas en inglés).

“La Industria de Bienes Raíces de Puerto Rico siempre ha sido uno de los sectores más importantes de nuestra economía. Lamentablemente, también ha sido de las más impactadas por la recesión y los eventos de la naturaleza. Todos hemos sido testigo de la reducción significativa de los valores de las propiedades año tras año, de la merma de construcción de residencias y edificios, proyectos nuevos que no se logran vender, el difícil acceso al crédito, el incremento de la morosidad, así como las decenas de miles de ejecuciones de hipotecas. Tenemos que buscar alternativas claras y viables para revertir esto”, señaló la legisladora novoprogresista.