El boricua Neftalí Soto acaba de regresar triunfal nuevamente a Puerto Rico luego de coronarse por segunda temporada seguida como el campeón jonronero de las grandes ligas del béisbol en Japón.

Como lo había hecho en la temporada del 2018, Soto dominó la liga japonesa en cuadrangulares y carreras impulsadas.

 “Primero que todo, le doy gracias a Dios por todas las bendiciones y por todo lo que he hecho en mi carrera. Este año pensaba que iba a ser más difícil, pero se trabajó fuerte. Tuve una buena temporada y estoy bien agradecido por eso”, dijo el bateador de 30 años que subió a las Grandes Ligas de Estados Unidos con los Rojos de Cincinnati y perteneció a los White Sox de Chicago y a los Nationals de Washington, antes de irse a probar suerte y establecerse como una estrella en la Liga Central de Japón.

Soto, natural de Florida, Puerto Rico, lideró la liga con 43 jonrones y 108 carreras impulsadas. Fueron números que guiaron a su equipo Bay Stars de Yokohama a alcanzar la postemporada luego de llegar en segundo lugar entre seis equipos que componen la Liga Central.

Soto fue el único jugador  con más de 40 jonrones y 100 carreras impulsadas en la temporada de 143 juegos.

Pero no fue fácil, como se lo habían advertido sus coaches. Soto detalló que estuvo bateando .238 a mitad de temporada y que estaba lejos de los 40 jonrones faltando tres semanas de la temporada. 

Su dirigente, el venezolano Alex Ramírez, se lo estaba recordando. Pero Soto hizo los ajustes en el plato a tiempo, en particular con los lanzadores que no le querían tirar  recta cuando él estaba en ventaja del  conteos, porque creían que el boricua sería agresivo para producir carreras. Dijo que tuvo que ser paciente.

“Después de eso pude coger ritmo y tener una mejor temporada”, destacó quien terminó la temporada con promedio de embasamiento de .348.

Soto aumentó de 41 a 43 la cantidad de jonrones de una temporada a otra. En el 2018 jugó 107 partidos, 34 partidos menos que en el 2019.

Aunque ha ido en aumento, Soto ve  lejos la frontera de 50 jonrones en una temporada.

“No es tan cerca 43 de 50 como parece. Este año no me pasaba por la mente llegar a 40. Lo que quería era subir el promedio. Cincuenta es difícil y está lejos. No sé cómo el récord de jonrones de Japón es de 60”, dijo con sinceridad.

Soto, quien principalmente se desempeño como segunda base en la campaña aunque también jugó en los bosques, ya tiene segura una tercera temporada con los Bay Stars. Será una campaña importante porque luego de ella será agente libre y en la misma podría buscarse un gran contrato multianual en Japón así como ver si se le abren las puertas financieras para regresar a las Grandes Ligas.  En fin, Soto jugará en el próximo año por la oportunidad de asegurar su futuro financiero.

Para ello, en lo particular, Soto quiere trabajar en su promedio de bateó luego de bajar de .310 en el 2018 a .269 en el 2019.

“Me dijeron que tenía que trabajar un poco más, que tenían fe que podía batear más promedio. Y los jonrones y los RBI, se trabaja para eso también. Ahora uno conoce más a los lanzadores, que uno no está acostumbrado a su mecánica, que allá los japoneses tienen seis lanzamientos y los tiran todos. Hay que trabajar”, dijo Soto.

 Soto destacó que no le cierra las puertas a regresar en las Grandes Ligas, como han hecho muchos jugadores importados a Japón que han puesto números y han sido reclutados de vuelta al béisbol en Estados Unidos. Pero dijo que  también analizará las ofertas en Japón, en donde la vida la ha sonreído y en donde está a gusto con su cultura e idioma. 

“Este es el trabajo de uno. Mientras más puertas tengas abiertas, mejor, para uno llegar a ser alguien en el deporte de la pelota. A mí me encanta Japón. Me gusta como te tratan, la cultura. Me gusta cómo se juega la pelota allí. Si se da la oportunidad de terminar mi carrera allí, voy a estar contento también. Es bonito”, dijo el jugador que es representado por Francis Marquez y la firma MAS+.