Ricardo Rosselló Nevares seguirá como cabildero por la estadidad luego que el Tribunal Supremo de Puerto Rico decidiera no intervenir en el caso al declarar “no ha lugar” a los recursos de certiorari.

Entonces, quedará vigente la decisión del Tribunal de Apelaciones que lo certificó como un candidato que cumplía con los requisitos para el puesto y que lo llevaron a juramentar al cargo.

“Atendidos los recursos de certiorari de epígrafe se ordena su consolidación y se provee no ha lugar a ambos por considerar que la Sentencia emitida por el Tribunal de Apelaciones el 8 de julio de 2021 es sustancialmente correcta”, lee el documento, reseñado por diversos medios del País.

Tanto el Partido Popular Democrático como el Proyecto Dignidad habían acudido al máximo foro judicial para apelar la decisión que permitía al renunciante gobernador continuar en el cargo.

El pasado 8 de julio, un panel del Tribunal de Apelaciones —compuesto por los jueces: Roberto Rodríguez Casillas, Giselle Romero y Carlos Candelaria Rosa— revocó la sentencia del Tribunal de Primera Instancia que descalificaba a Rosselló Nevares como cabildero por la estadidad por no cumplir con los requisitos de ley para el cargo.

El foro judicial dictaminó que la jueza superior Rebecca de León Ríos “carecía de jurisdicción” para no permitir la certificación del renunciante gobernador.

Además, calificó la demanda como “prematura”, pues el panel de jueces entiende que un candidato por nominación directa o “write-in”, como en el caso de Rosselló Nevares, primero tiene que ser certificado por la Comisión Estatal de Elecciones como delegado congresional electo para luego evaluarse si cumple con los requisitos.

Rosselló Nevares juramentó como delegado congresional el pasado 7 de julio en una actividad celebrada en la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico (Prfaa, en inglés) en Washington D.C. luego que la CEE lo certificara al puesto tras una decisión previa del Tribunal de Apelaciones que ordenó “la continuación de los procesos conducentes a la certificación”, hasta que se resolviera el caso en sus méritos.

Rosselló Nevares obtuvo el voto de 53,823 personas en la elección especial celebrada el pasado 16 de mayo que costó sobre un millón de dólares y que tuvo una participación de un 3.92%. Según los datos oficiales, solo hubo 92,448 papeletas de un total de 2,358,923 personas que están inscritas para votar en el País.

La jueza Rebecca de León Ríos, del Tribunal de Primera Instancia de San Juan, había ordenado el pasado miércoles, 30 de junio, la descalificación de Rosselló Nevares por no cumplir con los requisitos de ley para ocupar el cargo.

Según la sentencia, “no cumplía con los requisitos de residencia ni de domicilio electoral” al momento en que fue electo por nominación directa en el proceso que se llevó a cabo el pasado 16 de mayo, “por lo que su elección estuvo viciada de nulidad, fue inoficiosa y no surte efectos jurídicos”.