ACAPULCO, México — Las autoridades de la costa suroeste de México ordenaron el cierre de escuelas y preparaban refugios mientras la tormenta tropical Carlos azotaba las playas con grandes olas y fuertes vientos, desde su centro cerco de la costa.

Carlos fue degradado de la categoría de huracán el domingo, y si bien recobró algo de fuerza unas horas más tarde, los meteorólogos esperaban que no se intensificara mucho más en las 48 horas siguientes conforme se acercaba poco a poco a la costa.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, sin embargo, advirtió de que se esperaba que Carlos volviera a convertirse en huracán el martes de madrugada.

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La tormenta tenía su centro unos 205 kilómetros (125 millas) al oeste de Acapulco y tenía vientos máximos sostenidos de 110 kph (70 mph), dijo la agencia estadounidense. Se movía hacia el oeste noroeste a unos 9 kph (6 mph).

Las playas en Acapulco estaban mucho más vacías de lo normal el domingo, ante olas de dos metros que arrastraron más de una docena de cabañas de palma pequeñas y vientos que derribaron algunos árboles. Los trabajadores retiraban hamacas y sillas de la playa instaladas frente a hoteles y cafeterías.

No había informes de daños considerables y solamente una persona resultó herida al caer de una cerca, dijo Jonathan Capote, portavoz de Protección Civil del estado de Guerrero.

"Aparte de algunos carteles de publicidad y árboles caídos, no hemos tenido ningún daño", apuntó.

A la distancia en el mar, dos surfistas aprovechaban las grandes olas que se dirigían a la playa.

Serbio Piña, gerente de riesgos para negocios y proveniente de la Ciudad de México, figuraba entre un grupo de espectadores que observaban los efectos del mal clima.

"Es impresionante. Tiene mucha fuerza", dijo. "Hay embarcaciones volteadas, cables caídos", afirmó.

Las autoridades dijeron que las escuelas cerrarían el lunes y solicitaron a los habitantes que permanecieran en sus casas.

Las autoridades estatales dijeron que 507 albergues, incluidos 98 en Acapulco, fueron preparados a lo largo de la costa de Guerrero.

Las zonas costeras al norte de Acapulco y más allá, hasta el estado de Michoacán, también adoptaban sus precauciones y las playas tenían menos gente de lo habitual.

El sábado, Carlos fue brevemente el tercer huracán de 2015 en la temporada del Pacífico oriental.

Los expertos advirtieron que incluso como tormenta tropical podría causar aguaceros con posteriores inundaciones súbitas y aludes que representan un peligro para la gente.

La lluvia podría alcanzar de 6 a 10 pulgadas de agua en el suroeste de México, con probabilidades de 15 pulgadas en algunas zonas, dijo el centro de Huracanes.

Una advertencia de huracán estaba vigente desde Tecpan de Galeana en Guerrero a Punta San Telmo en Michoacán, y un aviso de huracán del oeste de Punta San Telmo a Manzanillo, en el estado de Colima.

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